zumbido

Aquí está, a mi alrededor, sin sueño activo,
me rodea, me canta, me zumba: molesta.
El mosco merodeador, cazador de sangre,
insistente ser fastidioso,
incómodo…pesado.
Pesa ahora más por mi sangre…
y pesará más mi mano,
que con firmeza caerá
sobre su naturaleza frágil,
sobre su pequeño ser
ahora que posado está en la puerta.
Y luego de un sólo golpe,
me vendrá la comezón,
causada por su piquete,
que permanecerá en mi mucho rato,
a pesar de su pesada muerte…

Así pasa en esta vida…
siempre se queda algo de alguien,
consecuencia de sus actos.

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